Hace muchos años me aficioné a los Cocteau
Twins, una banda que componía músicas "especiales"... bueno "más"
especiales que las que hacen otras bandas. Si fuera un especialista
diría que hacían Dark Wave... qué triste es tener que darle nombres a
las cosas para poderlas entender.
Hacían "músicas especiales...
Lo
cierto es que extravié los discos que tenía,... ya sabes, esas
superficies redondas, planas, negras y brillantes que exponíamos a la
presión de una aguja de diamante y que nos devolvían -misteriosamente-
música... bueno, música y también ruido de fondo.
Extravié
los discos en una mudanza y no he dedicado ni un segundo a buscarlos...
Alguien me dijo que la música de los Cocteau Twins tenía efectos sobre
nuestra percepción no consciente... vamos, que te "controlaba"... y
añadían que te inducía al suicidio y a la depresión.
Me dió miedo... Qué ridículo!... ¿verdad?...
¿O tal vez es lo normal?...
Cuando
alguien nos advierte de un peligro, solemos caer en una de estas
opciones: tenemos miedo y no nos movemos, esperando que el peligro
desaparezca, se transforme, se licúe... o bien, tenemos miedo y
actuamos, a veces corriendo como locos, a veces golpeando a diestro y a
siniestro, ... sólo algunas veces tomamos decisiones más o menos
razonables cuando tenemos miedo.
Esta tarde he asistido a una reunión de inicio de curso en nuestra Escuela... y alguien allí habló del miedo...
Decía, más o menos:
"Nuestros
hijos acaban de empezar un nuevo curso, en el que deberán esforzarse y
trabajar... tienen 15 años o los tendrán en breve... y tenemos que
ayudarles a aprender a vivir sin miedo... podemos decirles que están en
una edad preciosa, en una edad inquieta, en una edad de
descubrimiento... pero no tenemos derecho a decirles que están en una
"edad difícil", porqué "difícil" tiene que ver con el miedo... y si les
educamos con el miedo les enseñaremos a temer...".
Yo,
además, añadiría que "si les educamos con el miedo les enseñaremos a
temer.. y alguien que tiene miedo es fácil de dominar o incapaz de
dominarse".
Volviendo a los Cocteau Twins... ¿conocéis Sugar Hiccup?... está sólo a un clic... una delicia, ... creo...
Sin quererlo, mientras escribía esto, he escuchado algunos de sus temas... y... ¿sabéis qué?... no ha pasado nada.
Más información sobre el miedo, y también una reflexión de Pilar Jericó.
Más información sobre los Cocteau Twins.
miércoles, 15 de diciembre de 2010
martes, 6 de octubre de 2009
"El soplón" (The informant, 2009)... acercamiento a la mentira
El jueves pasado fui a ver "El Soplón", la
última película de Steven Soderberg... y a mi -¿qué queréis que os
diga?- me ha gustado.
Es cierto que la primera parte del film es lenta, pero Damon está soberbio y por otra parte me parece que ese es el ritmo adecuado para contarnos la vida de alguien tan gris como Whitacre... o, mejor dicho, de uno de los Whitacres.
Si queréis saber más... id a verla... y no os vayáis de la sala hasta el final de la película... Yo creo que vale la pena.
De todas formas, hay opiniones de todos los tipos:
- El soplón. Crítica de Sandro de Rosa
- El soplón. Crítica de Sergi Sánchez
- El soplón. Excelente damon, Soso Soderbergh. Crítica de Alberto Abuín
Es cierto que la primera parte del film es lenta, pero Damon está soberbio y por otra parte me parece que ese es el ritmo adecuado para contarnos la vida de alguien tan gris como Whitacre... o, mejor dicho, de uno de los Whitacres.
¿Quién miente?
¿Quién dice la verdad?
¿Cuál de los Whitacres?
Y, al fin y al cabo, ¿qué es verdad y qué es mentira?Si queréis saber más... id a verla... y no os vayáis de la sala hasta el final de la película... Yo creo que vale la pena.
De todas formas, hay opiniones de todos los tipos:
- El soplón. Crítica de Sandro de Rosa
- El soplón. Crítica de Sergi Sánchez
- El soplón. Excelente damon, Soso Soderbergh. Crítica de Alberto Abuín
domingo, 4 de octubre de 2009
He llegado de vuelta de Sort con el coche repleto de setas
Bueno, no es verdad,... no tengo el coche
repleto de setas... bueno en realidad sí estaban en el coche... bueno,
no exactamente...lo cierto es que nos las habíamos comido... es decir,
que sí que el coche estaba repleto de setas aunque "se habían
transformado"...
Me encanta salir a buscar setas - cazarlas, como decimos por aquí-... A veces pienso que lo que me gusta es comérmelas -que también- pero en realidad lo que me gusta es buscarlas... mucho más que encontrarlas.
Esto
me recuerda un poco a la historia de Don Juan: pobre hombre, condenado a
seducir y seducir una mujer tras otra, sin parar, porque tras poseerlas
perdían todo su interés que redirigía de nuevo hacía otras presas.
Esa idea de la búsqueda constante creo que es lo que me anima cuando paseo por el bosque buscando las setas. Mienrtas camino pienso "¿Dónde se han escondido?" y me contesto "Seguro que detrás de esa mata hay una... o varias...".
Y entonces la respiración se acelera... bueno, también es por la subida, claro, pero eso no cuenta... y la mirada se agudiza, intentando atravesar las hojas de ese arbusto o de ese arbolito que me cortan la visión... además el sol atraviesa las ramas altas del bosque y chocan en mis gafas produciendo unos destellos que confunden la percepción.
Llegas hasta la mata, te agachas, ... algo te dice que allí no está lo que buscas... de hecho, la ausencia de los que buscas te dice que allí no está... y piensas "Claro!... seguramente estará allí...", un metro o dos hacia la derecha... y vuelves a empezar el ciclo...
Cuando encuentras lo que buscas, te recorre un temblor... bueno, un temblorcito, no hay que pasarse porque sólo es una seta... y dudas entre gritar a tus compañeros para que vengan a ver el hallazgo, o ponerte de rodillas para preparar el corte de navaja que te permitirá llevart el trofeo...
Yo, por lo general, me callo, me agacho, la observo, me regocijo, y la corto... más o menos por ese orden... y luego, un segundo más tarde, pienso de nuevo "¿Dónde se han escondido?".
Una y otra vez, el proceso se repite... y aunque ya sabes que probablemente no estarán tras esa mata a la que te acercas... no dejas de caminar... una y otra vez
Para saber algo más sobre el Donjuanismo
Para saber algo sobre "els rovellons" y los "cazadores de setas" (en catalán)
Me encanta salir a buscar setas - cazarlas, como decimos por aquí-... A veces pienso que lo que me gusta es comérmelas -que también- pero en realidad lo que me gusta es buscarlas... mucho más que encontrarlas.

Esa idea de la búsqueda constante creo que es lo que me anima cuando paseo por el bosque buscando las setas. Mienrtas camino pienso "¿Dónde se han escondido?" y me contesto "Seguro que detrás de esa mata hay una... o varias...".
Y entonces la respiración se acelera... bueno, también es por la subida, claro, pero eso no cuenta... y la mirada se agudiza, intentando atravesar las hojas de ese arbusto o de ese arbolito que me cortan la visión... además el sol atraviesa las ramas altas del bosque y chocan en mis gafas produciendo unos destellos que confunden la percepción.
Llegas hasta la mata, te agachas, ... algo te dice que allí no está lo que buscas... de hecho, la ausencia de los que buscas te dice que allí no está... y piensas "Claro!... seguramente estará allí...", un metro o dos hacia la derecha... y vuelves a empezar el ciclo...
Cuando encuentras lo que buscas, te recorre un temblor... bueno, un temblorcito, no hay que pasarse porque sólo es una seta... y dudas entre gritar a tus compañeros para que vengan a ver el hallazgo, o ponerte de rodillas para preparar el corte de navaja que te permitirá llevart el trofeo...
Yo, por lo general, me callo, me agacho, la observo, me regocijo, y la corto... más o menos por ese orden... y luego, un segundo más tarde, pienso de nuevo "¿Dónde se han escondido?".
Una y otra vez, el proceso se repite... y aunque ya sabes que probablemente no estarán tras esa mata a la que te acercas... no dejas de caminar... una y otra vez
Para saber algo más sobre el Donjuanismo
Para saber algo sobre "els rovellons" y los "cazadores de setas" (en catalán)
viernes, 2 de octubre de 2009
Bienvenida a Proceseando
Blog dedicado a cosas que están en
proceso... es decir: cambio, transformación, aprendizaje, desaprendizaje,
crecimiento, evolución, (auto)liderazgo, comunicación, individuos,
cerebro, personalidad, (inter)conflicto, no saber, descubrir
Lo dicho, cosas que están en proceso...
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